Nuestros Objetivos
La iglesia, como pueblo de Dios, está llamada a la:
- Comunión: dirigida a las relaciones y atención entre los miembros de la iglesia y con el pueblo de Dios.
- Adoración: como estilo de vida personal y expresado en el culto comunitario.
- Discipulado: ayudando a cada creyente a crecer de acuerdo al modelo que es Cristo.
- Testimonio: expresando el evangelio a quienes no lo conocen tanto en palabras como en hechos.
- Servicio: poniendo nuestros dones y habilidades al servicio de la extensión del Reino de Dios y el crecimiento de la iglesia.
Para llevar a cabo la tarea son necesarios dos requisitos:
• CREAR PUENTES CON NUESTRA CULTURA y CONTEXTO para compartir el evangelio.
• COMPROMETERSE con el Señor, con la Iglesia y con nuestra generación.